El Quinto Dragón es una historia mágica, que te transporta a un mundo donde lo inimaginable es realidad y lo fantástico está más que presente. Cada capitulo se turna para contarla en las voces de nuestros protagonistas, Abi y Jan.

No quisiera contar mucho acera de la historia, porque es tan corta que cualquier cosa que diga ya seria demasiado. Si les puedo decir que los protagonistas se ven envueltos en guerras de poder entre aquellos que quieren acabar con los dragones y estos mismos. Y es que si, en esta historia los dragones existen, son imponentes y los humanos les temen, por eso han unido fuerzas para derrotarlos y extinguirlos.
Pero además el amor también tiene su aparición. Abi es una chica que vive con una anciana en Puerto Esmeralda, no recuerda de donde viene y tiene unos hermosos ojos dorados. Tiene un poder especial que descubrirá con el tiempo, algo que une su imaginación con la realidad con tan solo un papel y un lápiz.
Un día ve llegar a Jan, un joven perdido que no recuerda mucho de su pasado. Se vuelven los mejores amigos con el tiempo, pero pasará algo que los alejará para cada uno tomar su camino. Jan es un chico decidido y valiente que haría cualquier cosa por su amiga, pero por otro lado no cree en las historias fantásticas.
Es una historia llena de leyendas hermosas, las cuales la abuela les contaba a ambos. A medida que avanzas con la lectura te das cuenta que no son totalmente leyendas y que lo fantástico puede tener mucho de realidad.
No es una historia tan simple como les cuento en la reseña, tiene muchos giros y situaciones que te harán pegar saltos de emoción. El final es precioso y la forma en que esta narrada la historia te transporta a esos mundos maravillosos contados en ella.
No puedo describirla de otra forma si no como una historia mágica, que recomendaría a cualquiera su lectura. Al terminar con ella compruebo que todo lo que escribimos en un papel puede tener un gran valor ahora o en el futuro.

El Quinto Dragón fue la novela ganadora del Primer Premio de Literatura para Jóvenes FeNaL-Norma.