Título: El Diario de Ana Frank [Goodreads] Autora: Anne Frank [Página Oficial]

Páginas: 339, Editorial: Negret Books

★★★★

Si algo agradezco de ser amante de la lectura es poderme encontrar con historias conmomedoras que logran dejar una marca en mi vida. El hecho de que Ana haya existido en la vida real y que este haya sido, supuestamente, su diario real, hace que este libro sea toda una experiencia. Digo supuestamente porque hay muchas teorías que declaran la falsedad de este diario basados en la caligrafía, hechos históricos, testimonios, etc. Pero yo no quiero centrarme en eso, para ello hay muchas otras fuentes en internet, yo me centraré en lo que encontré en este libro y lo que me hizo sentir.

Al principio me costó congeniar con Ana. El diario parecía ser, en sus primeras páginas, sólo un relato del día a día de una familia judia escondida en un edificio a causa de la persecución de los nazis. Aunque era interesante ver cómo lograron esconderse y ajustarse a un nuevo hogar del cual no podían salir nunca a menos que quisieran seguir viviendo, las páginas pasaban sin pena ni gloria. Ana parecía ser una niña de 13 años que aún no lograba ver la magnitud de la situación en la que vivía.

A medida que pasan los años se nota el cambio en Ana. No sólo es mas consiente de la situación de su país y del peligro que corren día a día, si no también de sus sentimientos y emociones hacia su familia y las demás personas que viven con ella. Debo aceptar que hay páginas donde no parece que una niña de la edad de Ana las hubiera escrito. Son demasiado profundas y elocuentes. O la niña era sumamente inteligente, o como les mencione arriba, el diario fue alterado. El caso es que eso no le quita la capacidad que tiene de llegar a tu corazón.

"Me da la sensación de ser un pájaro enjaulado al que le han arrancado las alas violentamente, y que en la más absoluta penumbra choca contra los barrotes de su estrecha jaula al querer volar."

Los días de los casi dos años y medio que pasó en ese encierro, aunque con alimento básico para poder sobrevivir, nunca fueron fáciles. Ana habla sobre la soledad. No se sentía una niña muy querida por su familia. La convivencia fue dura, el no poder salir a la calle desesperante, las bombas y sonidos de aviones infundían terror en ella. No podían hacer mucho ruido, no podían abrir las ventanas. Todo esto lo relata Ana. Aunque a veces sientes la desesperación, Ana trataba de alguna forma escribir con buenos ánimos y la esperanza de libertad siempre estuvo en ella. Incluso relataba las discusiones de manera jocosa y con un buen sentido del humor.

Eso fue lo más duro. Saber que esta niña tenía tantas esperanzas por salir de nuevo en total libertad y que nunca logró hacerlo. Pensar en su destino rompió en pedazos mi corazón. Ana se había convertido casi en una amiga, conocía todos sus secretos gracias a su diario. Luego buscando su historia me enteré de su final (ya que el diario claramente no lo relata, termina abruptamente en un día normal de Ana) y no podía asimilar la clase de injusticia que tuvo que vivir ella y su familia. Hay páginas enteras con reflexiones maravillosas acerca de la vida y la libertad en el diario de Ana. Creo que si ella hubiera sobrevivido a los campos de concentración, habría sido una gran periodista. Sus criterios los explicaba de una manera bastante clara, siempre muy arraigados a ella. 

"Mientras exista este sol y este cielo tan despejado, y pueda verlo, no podré estar triste"

Si este libro me ha enseñado algo es a tener fuerza y esperanza incluso en los peores momentos. No perder la cabeza cuando hay oportunidades de lograrlo. Si sientes que no hay esperanzas, mira al cielo, la naturaleza, toda la creación. Seguro te sentirás mucho mejor. Tenemos derecho a la paz, a la convivencia sana, sin distinción de nada porque todos somos iguales. Eso me lo reafirmó Ana. Me da muchísima pena el final que esta niña tuvo, teniendo en cuenta todo lo que pudo haber hecho en su vida con la inteligencia y ganas de vivir que tenía. Al menos el sueño de publicar su diario se hizo realidad y marcó muchas vidas alrededor del mundo.

Les recomiendo leer este libro con paciencia y mente abierta. Lo mejor es situarse en la época, informarse en lo básico acerca de la Segunda Guerra Mundial. La lectura es muy ligera y se pasa muy rápido luego de las primeras páginas  y a medida que vas conociendo mejor a Ana. Debo aclarar que el libro en sí no describe hechos explícitos de crueldad o violencia. Sólo son los sentimientos de una niña respecto a la guerra, el encierro y su familia. Ojalá puedan leerlo en algún momento de sus vidas.

La Autora.

Annelies Marie Frank Hollander,  fue una niña judía alemana, mundialmente conocida gracias al Diario de Ana Frank, la edición en forma de libro de su diario íntimo, donde dejó constancia de los casi dos años y medio que pasó ocultándose, con su familia y cuatro personas más, de los nazis en Ámsterdam (Países Bajos) durante la Segunda Guerra Mundial. Un informador neerlandés guio a la Gestapo a su escondite. Fueron arrestados y toda la familia fue trasladada en tren  hacia el Campo de concentración de Auschwitz, viaje que les llevó tres días. Mientras tanto, Miep Gies y Bep Voskuijl, dos de las personas que los protegieron mientras estuvieron escondidos, encontraron y guardaron el Diario y otros papeles de Ana. Ana pasó un mes en Auschwitz II-Birkenau y luego fue enviada a Bergen-Belsen, donde murió de tifus en marzo de 1945, poco antes de la liberación. Sólo su padre logró salir del Holocausto con vida. Miep le dio el diario, que editaría con el fin de publicarlo con el título Diario de Ana Frank, que ha sido ya impreso en 70 idiomas.